Como todos los años este junio se celebró la Conferencia anual (la 101ª) de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), y Venezuela estuvo presente con una nutrida representación tripartita: gubernamental, gremial empresarial y sindical. Sorprende al retorno de la Conferencia que voceros sindicales anuncien que solicitarán al gobierno hacer las diligencias para que Venezuela se retire de la OIT. ¿Se trata de un hecho inédito? Repasemos, a través de las próximas páginas, la historia de las dificultades que han afectado las relaciones entre Venezuela y este organismo internacional.
Los voceros representan la recién creada Central Bolivariana Socialista de los Trabajadores. Los argumentos anunciados mencionan que esta “organización no es nada democrática” (Osvaldo Vera, diputado y sindicalista). Todo parece relacionarse con el hecho de que esta organización ha solicitado enviar una misión el próximo mes de Octubre para conocer la situación laboral del país, a propósito de denuncias de entes empresariales y sindicales críticos del gobierno nacional. Para ubicar la relación de Venezuela con la OIT, es importante mencionar algunos hechos que en los 92 años de existencia de esta organización internacional se han presentado en relación con nuestro país. La OIT fue creada apenas concluida la Primera Guerra Mundial, en 1919, en el marco del Tratado de Versalles. Este tratado dio origen a la Sociedad de las Naciones, institución antecesora de la actual Organización de las Naciones Unidas. La OIT sobrevivió a la crisis mundial que significó la Segunda Guerra Mundial, no obstante que la Sociedad de las Naciones dejó de existir. Hay que destacar que Venezuela fue uno de los países fundadores de la OIT. Hoy esta organización cuenta con la afiliación de 193 países, es decir todo el orbe del planeta tierra.